#SoloQuedaVOX

#SoloQuedaVOX

jueves, 9 enero, 2025
17.3 C
Alicante

El viaje de Pedro Sánchez a África ¿Una política de chantaje disfrazada de cooperación?

Pedro Sánchez ha vuelto a Mauritania en una visita que, lejos de ser un gesto diplomático, refleja la preocupante tendencia de su gobierno a destinar enormes sumas de dinero a países africanos en un intento desesperado por frenar la inmigración ilegal. Este es su segundo viaje a tierras mauritanas en apenas seis meses, un hecho que no pasa desapercibido si consideramos que, tras la generosa contribución financiera española a un programa de la ONU en Mauritania, la cuñada del presidente, Kaori Matsumoto, ha sido contratada en dicho proyecto.

El 27 de agosto, Sánchez se embarca en una gira por Mauritania, Gambia y Senegal, en medio de una crisis migratoria que tiene a Canarias al borde del colapso. ¿La solución del gobierno? Prometer más dinero a estos países, una estrategia que ha demostrado ser tan ineficaz como costosa para los contribuyentes españoles. En esta ocasión, Sánchez destinará 200 millones de euros a Mauritania en los próximos cinco años para supuestamente frenar la inmigración ilegal. Sin embargo, la realidad es que, a pesar de estos desembolsos multimillonarios, la llegada de inmigrantes desde estas regiones no ha hecho más que aumentar.

La pregunta que debemos hacernos es: ¿Por qué seguimos enviando dinero a estos países si no son de fiar? Llevan años recibiendo fondos de España y, cuando deciden que necesitan más, abren el grifo de la inmigración, lo que obliga a nuestro gobierno a ceder nuevamente a sus demandas. Este es un ciclo de extorsión que parece no tener fin, y que los sucesivos gobiernos del PP y el PSOE han aceptado sin rechistar.

Es hora de cuestionar seriamente esta política de chantaje. El dinero que estamos regalando a estos países debería ser invertido en España, en reforzar nuestras fronteras, en potenciar nuestra armada y en establecer un sistema eficaz de deportación para los inmigrantes ilegales que ingresan en nuestro territorio. La política de puertas abiertas ha traído consigo enfermedades, delincuencia y una creciente sensación de inseguridad en nuestras calles. Y mientras tanto, las ONGs, que actúan como cómplices en este negocio de la inmigración, se enriquecen bajo la fachada de la «ayuda humanitaria», recogiendo inmigrantes en aguas cercanas a estos países y trayéndolos a España, cuando los puertos más cercanos son precisamente los de esas naciones.

Este negocio de la inmigración debe terminar. Es imperativo que el dinero que estamos utilizando para «comprar» la cooperación de estos países se utilice en beneficio de los españoles. Y cuando se les acabe el chollo, entonces sí, negociemos, pero desde una posición de fuerza. Si quieren inversión española, tendrán que demostrar su compromiso real en frenar la inmigración ilegal. Ya basta de chantajes y extorsiones.

Sin embargo, para implementar una política tan firme, necesitamos un gobierno que no se deje influenciar por la Agenda 2030 ni por las políticas globalistas de la Unión Europea. Necesitamos un liderazgo fuerte que defienda los intereses de España por encima de los intereses ajenos, que son los que están llevando a nuestro país al borde del abismo.

La situación migratoria en España, especialmente en Canarias, es dramática, y es una crisis creada por los políticos del PP y el PSOE. El efecto llamada de ambos partidos, junto con la regularización de medio millón de inmigrantes ilegales, solo alimenta las ansias de negocio de estos países y de las ONGs que ven en la irresponsabilidad de nuestros políticos una oportunidad para lucrarse sin fin.

¿Por qué los españoles no tenemos voz ni voto en estas decisiones? ¿Por qué no podemos decidir si queremos continuar con esta política de puertas abiertas o si preferimos destinar esos recursos a nuestra defensa y seguridad? La falta de transparencia y la imposición de estas políticas por parte de nuestros gobernantes es una traición a la voluntad popular y pone en peligro nuestro estilo de vida y nuestra seguridad.

Estas son preguntas que los españoles debemos empezar a plantearnos seriamente. No podemos seguir permitiendo que el PSOE y el PP nos arrastren a una situación insostenible, mientras ellos se enriquecen a nuestra costa. Porque, aunque no se hable de ello, cada vez es más evidente que el enriquecimiento personal de ciertos políticos y sus familiares va de la mano con estas decisiones cuestionables y dañinas para el país.

España va como una moto, pero directa hacia el abismo, mientras los españoles seguimos mirando hacia otro lado, permitiendo que nuestros políticos sigan riéndose de nosotros.

Recomendación del mes

spot_img

Lo más leído

Te podría interesar...

Categorías de noticias más populares en #SoloQuedaVOX